La habitación de tu hijo es su lugar en el mundo: un espacio donde puede ser él mismo, sin presiones, y sentirse tranquilo. Ayudalo a crear un ambiente donde pueda jugar, aprender, descansar y recargar energías, sin importar cuántos años tenga.

Si estás por armar o renovar la habitación de tu hijo, seguro que te tenés mil dudas. Ya sea que estés esperando la llegada de tu primer bebé o quieras darle un toque nuevo a la habitación de tus chicos, este guía te va a ayudar con los básicos para lograr un ambiente funcional, cómodo y con mucho estilo.

Les puse algunas imágenes de referencia que me inspiraron mucho a la hora de armar la habitación de Pipe.

 

Lo primero es la seguridad

Lo más importante siempre es que el lugar sea seguro. Acá van algunas ideas:

- Elegí muebles con bordes redondeados o, si ya tenés algo con esquinas, protegelo con unos guardas.

- Protegé los enchufes y asegurate de que no haya cables colgando por ahí.

- Usá alfombras son grandes aliadas para cuando se caen.

 

Muebles que crecen con ellos

Los chicos crecen a una velocidad increíble, por eso lo mejor es apostar a muebles que se adapten a ellos con el tiempo:

- Camas que se transforman, cajoneras que tienen un montón de uso, estanterías bajas para que ellos mismos puedan guardar sus cosas, los muebles montesori son espectaculares para esto.

- Aprovechá cada rincón para el guardado, por ejemplo, con muebles que tengan cajones o camas con espacio debajo.

Que se note su personalidad

Si bien lo funcional es lo más importante, también podés hacer que el cuarto tenga onda. Un buen consejo es:

- Elegir colores suaves y agradables para las paredes, algo que no sea ni demasiado chillón ni demasiado serio. Los tonos pasteles, los colores neutros o incluso algo de color en los detalles (como almohadones o una pared de acento) quedan genial.

- Dejales poner su toque personal, es súper importante hacerlos participes de algunas decisiones, como elegir un par de posters o cuadros de sus personajes o temas favoritos.

 

Zonas para cada momento

Organizar bien el espacio ayuda a que todo tenga su lugar y los chicos puedan aprovecharlo al máximo. Algunas ideas:

- Un rincón para jugar: puede ser una alfombra cómoda, unos pufs o almohadones y mucho espacio para que se tiren y se muevan.

- Un espacio de lectura con una mini biblioteca o estantes al alcance de ellos.

- Un lugar para crear, con una mesa y sillas donde puedan pintar, hacer manualidades o jugar a lo que se les ocurra.

 

Iluminación cálida y suave

La luz es clave para crear un ambiente acogedor. Lo ideal es:

- Aprovechar la luz natural lo más posible, pero complementarla con una lámpara de techo que dé luz suave.

- Para la noche, una luz de baja intensidad o una lamparita nocturna que les dé tranquilidad si se despiertan a mitad de la noche.

 

Materiales cómodos y agradables

El ambiente de la habitación tiene que ser cálido y agradable al tacto. Pensá en:

- Alfombras de algodón, yute o lana que sean suaves y fáciles de lavar.

- Mantas, almohadones y cortinas que sean livianos, pero que den esa sensación de calidez.

- Paredes fáciles de mantener, por ejemplo, con pintura lavable o papel pintado que sea fácil de limpiar, por si los chicos deciden expresarse artísticamente.

Hacélos parte del proceso

Si ya son un poquito más grandes, que se involucren en la decoración es una excelente idea. Preguntales qué les gusta, si tienen algún personaje o color favorito, o si quieren elegir algo para poner en las paredes. ¡Se van a sentir más conectados con su espacio!

 

La habitación de tu hijo no es solo un lugar para dormir, es su espacio para crecer, explorar y disfrutar. A la hora de armarla, lo más importante es que se sientan cómodos y felices, con un lugar donde puedan ser ellos mismos. 

 

¿Qué te parece? ¿Estás pensando en un tema o estilo específico para el cuarto de tu hijo? ¡Contame y te ayudo a darle forma a esa idea!